Por Bryan Alejandro Gómez Manuel

Todo comenzó un 11 de marzo de 2020 cuando se dio por declarada una nueva enfermedad llamada Covid-19. En ese momento yo estaba preocupado por mí y por mi familia, porque supuestamente era muy contagiosa y letal. Desde ahí el mundo y yo empezamos a usar el cubre bocas y a ponernos gel antibacterial casi todo el tiempo. Después se vinieron las clases en línea donde entregaba actividades por medio de internet. Se me complicó al principio, pero poco a poco fui acostumbrándome a las clases en línea y a usar el cubre bocas constantemente.
A mi papá lo corrieron de su trabajo y mi mamá poco a poco fue enfermándose hasta que finalmente llegó al hospital por un coma diabético. Después de un mes mi mamá salió del coma sana y contenta porque se había librado de una muerte segura. A los pocos días, mi papá se fue a ver un trabajo donde lo llamaron para que finalmente le dijeran que estaba dentro del mismo.
Yo empecé a salir con mis amigos otra vez y obviamente usábamos el cubre bocas para no propagar el virus más de lo que ya estaba. En diciembre se propagó mucho más porque la gente salía constantemente con sus familiares.
En los últimos meses, los científicos han descubierto una vacuna para contraatacar la enfermedad y se ha dicho que ya están empezando a poner vacunas para normalizar otra vez la situación a lo que era antes.
Y yo gracias a dios me mantengo activo con las clases en línea.